El vado permanente tienen un poder que, a simple vista, no parece tener. Son pequeños, situados siempre en el mismo tipo de puertas, y parecen inofensivos. Podemos pensar que por un minuto no pasa nada, que dejamos el coche taponando un vado con las luces de emergencia y nada grave ocurrirá, pero lo cierto es que nos estamos jugando una grave multa.
Los vados permanentes, comúnmente conocidos como vados, tienen una gran autoridad puesto que representan un lugar en el que no se puede aparcar o estacionar, sea por el motivo que sea. Sirve para asegurar el paso ininterrumpido de vehículos y existen varios tipos.
📌 Índice
¿Qué es un vado permanente?
Un vado permanente es un permiso emitido por el ayuntamiento correspondiente, el cual reserva un espacio delimitado en la vía pública. Tiene como objetivo permitir el tránsito de vehículos, y la entrada o salida de los mismos de un espacio concreto. En ocasiones la licencia de este vado permanente conlleva la modificación de algún espacio de la calzada, o rebaje de algún bordillo, para facilitar la correcta entrada y salida de vehículos.
¿Quién puede solicitar un vado permanente?
Un vado es un derecho que cualquier persona titular o propietaria de un inmueble puede demandar. También lo puede demandar cualquier persona que ejerza servicios públicos, como por ejemplo, un taller de vehículos. El tercer y último caso es de los dueños de obras que necesiten habilitar un acceso concreto para la entrada y salida de vehículos.
¿Cómo solicitar un vado permanente?
Este proceso depende de la normativa de cada municipio, por lo que en el ayuntamiento correspondiente te informarán mejor. Pero por norma general existen una serie de documentación común a entregar:
- Una copia del DNI del propietario.
- Fotocopia del título de propiedad del inmueble.
- Plano de la situación del inmueble (detallar el ancho de acceso) y aportación de las licencias correspondientes.
- Pago de la tasa correspondiente.
- Descripción de la necesidad del vado permanente.
¿A qué da derecho?
Adquirir una placa de vado en el ayuntamiento municipal, como dicta el Reglamento General de la Circulación, da derecho al paso hacia el inmueble en cuestión. Además de ello garantiza la libre circulación por ese espacio, y el impedimento a que cualquier vehículo estacione en el vado. Asimismo, el dueño del inmueble podrá llamar a la Policía Municipal para que retire el coche estacionado en el vado.
Para que el vado sea legal, la placa deberá estar homologada y en vigor. No valdrá ningún otro distintivo como carteles caseros o pintadas en la puerta del garaje. Un cartel de vado homologado debe incluir la prohibición de estacionar, el nombre del municipio y el número de licencia.
¿Cuánto cuesta un vado permanente?
El precio de un vado no está regulado por ningún organismo nacional, es decir, variará en función del municipio en el que te encuentres. El precio también dependerá de la categoría de calle en la que se ubicará el vado, del espacio de acera a reservar y del espacio para el que se solicita el vado.
El precio medio de un vado en España parte desde los 50 euros anuales, llegando a alcanzar los 2.500€ al año si el vado se requiere para un espacio de, aproximadamente, 20 plazas de garaje. Además de esta tasa anual, habrá que pagar la placa de vado la cual serán 12 euros más.
¿Cuál es la multa por aparcar o estacionar en un vado permanente?
Como hemos comentado al principio, por muy buena idea que parezca dejar el coche un minuto delante de un vado, no deberíamos puesto que la sanción económica no nos hará ninguna gracia.
Sea o no nuestro vado, nadie podrá aparcar en ese terreno, el cual recordamos sigue siendo vía pública. Un vado permanente solo garantiza la libre entrada y salida de los vehículos autorizados, no aparcar o estacionar enfrente del mismo. Por lo tanto, si cualquier vehículo aparca en un vado, la multa será de 200 euros, pudiendo además, la grúa municipal, llevar tu vehículo al depósito.