Todos los días estás utilizando gas en tu hogar, ya sea para ducharte o bien para cocinar tu plato de comida preferido, de forma que actualmente sería muy complicado vivir sin este recurso. Pero, ¿te has preguntado alguna vez cuál es el origen del gas natural?
Cuando hablamos de gas natural estamos hablando de uno de los cuatro tipos de combustibles fósiles. Dentro de esta categoría encontramos, además del gas natural, el petróleo, carbón y gas licuado del petróleo. Todos ellos proceden de la acumulación de materia y/o seres vivos que se formaron hace millones de años en terrenos como cuencas, lagos… Hay que recordar que las fuentes de energía se dividen en fuentes renovables y no renovables, y el gas natural se encuentra entre estos últimos.
📌 Índice
El gas como recurso natural
El gas natural, como ya hemos comentado, procede de la descomposición de animales y plantas que existieron hace millones de años. Al ser un recurso procedente de las fuentes de energía no renovables, es un recurso limitado, por lo que está en peligro de que se vaya a acabar. Este motivo nos lleva a la casi obligación de dar un uso adecuado y responsable, tanto de las fuentes renovables como de las no renovables, pero sobre todo de estas últimas.
La composición del gas natural está basada en una mezcla de hidrocarburos, lo que equivale a un número de moléculas compuestas por átomos de hidrógeno y carbono, de ahí su nombre. Podemos encontrarlo almacenado de forma natural entre diferentes tipos de rocas, que facilitan o dificultan más su extracción. Normalmente, en las cavidades que se encuentra el gas natural, también podemos hallar recursos como el petróleo y agua.
España como principal importador
Son muchos los países de todo el mundo en los que se encuentran reservas naturales de gas, repartidos por todos los continentes que abarca nuestro planeta. España, no es un país que almacene este recurso, por lo que se ha convertido en el principal importador de gas natural de toda Europa.
Los sistemas de transporte de este recurso natural son dos: por gaseoducto o por GNL (Gas Natural Líquido). Ambos métodos se encuentran bastante igualados en porcentaje de actividad. Concretamente, son 11 los países a los que España compra gas natural, ocupando Argelia el 55% de las importaciones, seguido de Noruega, Qatar, Nigeria, etc.
Una vez el gas ha llegado a nuestro país, a través del gaseoducto o GNL, hay que almacenarlo hasta que las distribuidoras y comercializadoras se encarguen de hacerlo llegar a los hogares de la gente. Este almacenamiento es posible gracias a las 22 plantas que el continente europeo tiene instaladas a lo largo de su territorio, de las cuales 6 se encuentran en España.
Gas natural: diferentes usos
Cuando hemos recibido el gas en nuestro hogar, son muchos los usos que podemos darle para hacer nuestro día a día más cómodo. Las personas que tienen una caldera por gas natural, evitando la opción de termo eléctrico, están utilizando este recurso desde el momento en que encienden el agua caliente, como puede ser para darse una ducha. También está la opción de tener una cocina de gas natural, aunque ya no se comercializan tanto, podemos seguir viéndolas en muchos hogares.
Hoy en día están apareciendo en el mercado los coches de gas natural comprimido (GNC), los cuales poseen además la etiqueta “ECO”, por lo que están empezando a ser muy atractivos en el mercado. El hecho de que sean ecológicos se debe a que el gas natural está formado por metano, el cual genera menos dióxido de carbono en comparación con la gasolina o gasóleo de los coches tradicionales.
¿Quién distribuye este recurso?
Como ya hemos comentado, el gas natural llega a nuestro país a través de uno de los dos métodos de los que disponemos, para almacenarse en una de las seis ciudades que disponen de planta de almacenaje.
El siguiente paso es que las distribuidoras se encarguen de llevar este recurso a todos los hogares para que pueda ser utilizado, pero estas no podrían existir sin las comercializadoras, quienes ofrecen las tarifas de gas natural que puede contratar la gente. Aquí está la diferencia entre la comercializadora y la distribuidora.
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