Al solicitar una hipoteca compartida las posibilidades de que la concedan aumentan, ya que para los bancos supone una mayor estabilidad económica. Comprar una vivienda en pareja supone un importante paso, un proyecto común.
La responsabilidad por parte de ambos durará unos años, pero ¿qué ocurre cuando la relación termina? En este artículo de Precio.com vemos en qué consiste la hipoteca compartida y qué ventajas e inconvenientes tiene.
📌 Índice
¿Qué es una hipoteca compartida?
Emprender un proyecto con tu pareja es muy habitual, sobre todo cuando se habla de comprar una vivienda. Es más, muchas parejas, sin estar unidas por un vínculo legal como el matrimonio o como ser “pareja de hecho”, están unidas por la vivienda y su hipoteca. Para los bancos, esto supone una mayor estabilidad económica y aumenta las posibilidades de concesión.
Cuando se opta por una hipoteca en pareja, cada miembro asume una parte de la cuota. Esta parte dependerá del porcentaje determinado en la escritura hipotecaria. Es necesario mencionar que en caso de impago, ambos tendrán que responder de la deuda con sus bienes. Bienes presentes y futuros.
Ventajas de firmar una hipoteca en pareja
Firmar una hipoteca compartida tiene una serie de ventajas con respecto a si lo hiciéramos solos. Las principales son:
- El riesgo de impago es menor. En caso de que surja algún imprevisto como, por ejemplo, que alguno de la pareja vaya al paro, la hipoteca se podrá afrontar con los ingresos de la otra persona.
- Mayor facilidad de acceso a la hipoteca. El banco estará más predispuesto a conceder a una hipoteca a dos miembros, ya que esto suele mostrar mayor solvencia económica.
- La capacidad de endeudamiento es mayor. Como la suma de los ingresos de la pareja será mayor que la de una sola persona, la cantidad de dinero que se podrá destinar al pago de la hipoteca también será mayor.
Generalmente, la cantidad máxima de la cuota hipotecaria no puede ser superior al 35% de los ingresos. Si los ingresos son mayores, también podrá serlo la cuota y antes se podrá terminar de pagar la hipoteca.
Desventajas de la hipoteca en pareja
Las ventajas de una hipoteca compartida son muchas y muy buenas. Sin embargo, antes de asumir una deuda hipotecaria en pareja, debemos tener en cuenta qué ocurriría en caso de separación. Las principales desventajas de una hipoteca compartida son:
- Dificultad para hacer frente al préstamo hipotecario. A priori la cuantía a pagar será mayor porque se estipula teniendo en cuenta los ingresos de dos personas. En estos casos la solución es buscar una solución con el banco.
- Dificultad para que uno de los titulares salga de la hipoteca. Suele ser un proceso complicado porque supone que el banco pierda garantías de devolución. Sin embargo, debemos comentar la situación con la entidad financiera y buscar una solución.
Cómo cancelar una hipoteca compartida
En caso de ruptura de la pareja existen varias alternativas para que uno de los titulares salga del préstamo hipotecario. Entre las opciones están:
- Comprar la otra parte del inmueble. Uno de los miembros podrá quedarse con la totalidad de la vivienda pagando al otro miembro su parte.
- Vender la vivienda. En caso de que ninguno de los miembros de la pareja quierda quedarse con la vivienda, la opción más habitual es vender el inmueble a un tercer comprador y cancelar la hipoteca con la entidad financiera.
- Llevar a cabo una extinción de condominio. En este caso, uno de los miembros de la pareja cederá su parte. Los gastos de esta operación serán menores que los de compraventa debido a que solo se tendrá que pagar el IAJD (Impuesto de Actos Jurídicos Documentados) y ni el ITP (Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales).
En el caso de la extinción de condominio de la compraventa de la vivienda, habrá que hacer una novación hipotecaria para poner la vivienda a nombre del propietario nuevo. El banco será quien tenga que aprobar este cambio diciendo si el propietario es o no solvente.